Cómo cuidar los ojos de los niños según los expertos
Para garantizar una protección total, es necesario adquirir las gafas de sol en establecimientos sanitarios de óptica. No son complementos de moda y comprarlas en establecimientos no sanitarios -bazares, mercadillos y paradas ambulantes- puede generar graves problemas de salud visual y ocular: estas dilatan todavía más la pupila, que en el caso de los niños y niñas ya de por sí es más grande, y dejan pasar más cantidad de rayos UV.
Según el estudio Calidad óptica de los filtros solares de gafas comercializadas en establecimientos no sanitarios, el 25% de las gafas analizadas no protegen de la radiación solar. Además, destaca que el 93% dispone de lentes que no cumplen con la normativa vigente y que son nocivas para la salud.
“Nuestros ojos tienen una gran capacidad de adaptación y ajuste. Por ello, el usuario no se da cuenta de los defectos de las gafas de establecimientos no sanitarios. Aun así, el sistema visual sí las detecta y tiene que realizar un reajuste”, afirma Alfons Bielsa, presidente del Col•legi Oficial d’Òptics Optometristes de Catalunya.
La confusión aumenta todavía más puesto que estas gafas suelen llevar enganchadas las características ópticas, el código CE y las instrucciones de mantenimiento.
10 consejos para cuidar los ojos de los niños
En este sentido, es imprescindible la visita al óptico optometrista, el profesional sanitario en salud visual primaria responsable de aconsejar la mejor opción según las necesidades de cada persona.
Los consejos de los expertos para conseguir una buena protección son:
- Tenemos que proteger nuestros ojos –y, especialmente, los de los más pequeños- durante todo el año, también en invierno. En verano se tienen que extremar las precauciones. Por una parte, los niños pasan más horas al aire libre y, por otra, el nivel de rayos ultravioletas en verano es tres veces más alto que en invierno.
- Adquirir las gafas en establecimientos sanitarios (ópticas y secciones de ópticas en farmacias).
- Son preferibles las monturas de plástico por su durabilidad, resistencia, comodidad y coste. Dejar al niño o niña que elija la montura que más le guste: se sentirá más cómodo.
- Se aconsejan las lentes marrones o grises ya que son las que menos modifican los tonos. Descartar los vidrios demasiado oscuros.
- Aumentar la protección en las horas centrales del día (entre las 12 del mediodía y las 16 de la tarde).
- Se recomienda el uso de sombreros o gorras con visera.
- No fiarse de los días nublados. Las nubes no filtran los rayos ultravioletas.
- En caso de que el niño o niña tenga alguna deficiencia visual (miopía, hipermetropía o astigmatismo), las gafas de sol también pueden graduarse.
- El éxito será mayor si los padres/madres también las utilizan.
- No se pueden utilizar las gafas de sol para la observación de eclipses.