Negro o carey: el eterno dilema del estilo en gafas de vista
La actual temporada invita a mirar de frente con estilo. Las últimas colecciones de gafas de vista del Grupo De Rigo, entre ellas: Tous, Zadig&Voltaire, Just Cavalli, Roberto Cavalli, Philipp Plein, Yalea y Police apuestan por dos clásicos eternos: la montura negra y la montura carey. Dos universos distintos que comparten un mismo objetivo: enmarcar la mirada con personalidad.
Montura negra:
El poder del minimalismo. Icónica, moderna y atemporal, la montura negra nunca pasa de moda. Es la elección perfecta para quienes buscan un aire sofisticado y seguro. Su perfil definido y su acabado pulido realzan las facciones y crean un look fuerte, nítido y contemporáneo. Ideal para rostros de rasgos suaves, ya que aporta estructura y carácter, o para quienes buscan un contraste elegante con pieles claras y neutras.
Montura carey:
El encanto retro que vuelve una y otra vez. El carey, con sus tonos cálidos y sus vetas naturales, transmite sofisticación y calidez. Su versatilidad depende de los matices: los ámbar, miel y dorados favorecen a pieles cálidas, mientras que los marrones fríos o grisáceos resultan ideales para tonos de piel más fríos. Perfecta para quienes buscan un toque vintage, artístico o bohemio sin renunciar a la elegancia.
Cómo elegir:
El equilibrio entre piel y estilo. La elección entre una montura negra o carey no solo depende del color, sino también de la actitud. Si tu estilo se inclina hacia lo urbano y contemporáneo, el negro será tu mejor aliado. Si prefieres un aire más natural, cálido y con matices retro, el carey te conquistará. Y, por supuesto, la prueba definitiva es el espejo: probar ambas y dejar que tu reflejo hable.
El toque final:
Firmas que definen tendencia. Desde el espíritu femenino y delicado de Tous hasta la rebeldía urbana de Zadig&Voltaire, pasando por la elegancia felina de Just Cavalli y Roberto Cavalli, la exuberancia audaz de Philipp Plein, la sofisticación serena de Yalea o el carácter cosmopolita de Police, cada marca interpreta estos clásicos con su propio ADN estético. El resultado: una colección de estilos que demuestran que la verdadera tendencia no está en seguir la moda, sino en mirar el mundo con tu propia perspectiva.