Jaeger-LeCoultre, socia del Chaplin’s World

La prestigiosa empresa relojera se siente honrada de rendir homenaje al gran artista que fue Charlie Chaplin, no solo delante de las cámaras, sino también detrás, al asociarse con el Chaplin’s World.
La Manufactura, establecida en el Valle de Joux, en Suiza, desde 1833, ha mantenido a lo largo del tiempo una gran relación con el artista y su familia. Cuando Charlie Chaplin se instaló en el cantón de Vaud, el gobierno vaudois le ofreció un reloj Jaeger-LeCoultre Memovox. En aquella época el actor también recibió un péndulo Atmos por parte de una asociación de periodistas suizos. Estos dos testigos relojeros del patrimonio del reconocido actor serán expuestos en el Manoir de Ban, en Corsier-sur-Vevey, a orillas del lago Leman.
En el corazón de Manoir de Ban, Chaplin’s World vuelve a recrear los últimos veinticinco años de la vida de Charlie Chaplin en Suiza. Un estudio de Hollywood ofrecerá una sorprendente visión al mundo del cine de Charlot. Sumergido en callejones o sets de cine míticos, el espectador descubre o redescubre las obras maestras de Charlie Chaplin.
Desde hace muchos años, Jaeger-LeCoultre honra los conocimientos especializados del séptimo arte y rinde tributo a los grandes directores de cine. En el taller de la Manufactura, como en los estudios de producción de las películas, los artesanos y artistas están animados por una misma pasión y un mismo impulso creativo: hacer que cada segundo se convierta en un instante de eternidad. La atención al detalle, el perfeccionamiento de la técnica, la incesante creatividad y la bússqueda de la excelencia son algunos de los muchos valores que comparten estos dos mundos.