FLiPO participa en un proyecto de investigación de packaging biodegradable
FLiPO, la marca española especialista en gafas modulares, refuerza su compromiso con la innovación y la sostenibilidad al participar en el proyecto OrganicUP, una iniciativa pionera que investiga la viabilidad de desarrollar packaging biodegradable y reciclable a partir de residuos de kombucha (SCOBY).
Este proyecto tiene como objetivo transformar estos residuos orgánicos en biomateriales funcionales, reduciendo significativamente el impacto ambiental y fomentando la economía circular. Cumpliendo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), OrganicUP es un proyecto en el que participan diversas empresas y organizaciones especializadas en diseño, investigación de biomateriales y tecnologías innovadoras. El proyecto está coordinado por el nexo de unión de instituciones Packaging Cluster y además cuenta con la colaboración de la Agencia de branding y packaging Batllegroup, el Centro Universitario de Artes y Diseño de Barcelona BAU, Centro Universitario de Diseño, Blue Room Innovation y Tallers Soteras, entre otros. Los residuos de kombucha son proporcionados por Vitae Kombucha y Bioma Kombucha. El proyecto cuenta con el soporte de ACCIÓ, entidad que impulsa la competitividad y la innovación empresarial en Cataluña.
El crecimiento del consumo de kombucha en España ha sido del +532% entre 2020 y 2022, reduciendo de manera significativa los residuos y emisiones de CO2 mediante la reutilización de SCOBY (Symbiotic Culture of Bacteria and Yeast). En España, la producción de kombucha ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, con diversas empresas dedicadas tanto a la elaboración de la bebida como al suministro del cultivo SCOBY, esencial para su fermentación.
A nivel mundial, en 2023 aproximadamente fueron 2.700 millones de dólares en consumo mundial de bebidas de kombucha. Se proyecta que el mercado alcance entre 4.000 y 4.650 millones de dólares en 2029, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) que oscila entre el 9,48% y el 15,6%.
Dónde se produce la kombucha
El mercado estadounidense ha sido pionero en la comercialización de la kombucha desde 1995. En Europa, la kombucha ha ganado terreno en países como el Reino Unido, Alemania, Italia y España. En España, Cataluña se destaca como la región líder en consumo, registrando ventas que superan los 5,3 millones de euros al cierre de 2022. La región de Asia-Pacífico presenta el mayor crecimiento en el mercado de la kombucha, con China emergiendo como uno de los principales productores y consumidores.
Los residuos que produce la kombucha son restos de hojas de té, excedentes de SCOBY, pulpa de frutas. Es común que por cada litro de kombucha se utilicen entre 5 y 10 gramos de hojas de té y alrededor de 50 gramos de azúcar. Esto implica que, tras la infusión, se generan aproximadamente entre 5 y 10 gramos de residuos de hojas de té por litro, describen. Se gestionan con: compostaje, producción de biomateriales y alimentación animal.
Pensando en el futuro
FLiPO está explorando nuevas soluciones de packaging sostenible que concuerdan con su filosofía de innovación y sostenibilidad. A través de este proyecto, la marca evaluará la viabilidad de un nuevo estuche elaborado con materiales biodegradables, buscando garantizar la máxima funcionalidad y resistencia sin olvidarse de la parte estética.
Además del eco-diseño del packaging, esta iniciativa apuesta por la implementación de tecnología blockchain para garantizar la trazabilidad del material, proporcionando información transparente sobre su origen, composición y proceso de reciclaje. Esto supone un valor añadido clave para el consumidor, que podrá verificar de manera fácil y fiable la sostenibilidad del producto.
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